Gracias Luz
Existen
otro tipo de mujeres que no leen poesía,
las que no compran
libros,
las que toman café de olla en lugar de capuchinos,
las
que no saben quien es Bukowsky
ni tampoco Monica Gaee o
Sabines.
Pero saben el camino a bibliotecas publicas.
Son
ese tipo de mujeres que trabajan
en casa de familias,
en
fondas de esquinas,
lavando y cosiendo ajeno.
Las que
no usan bolsas Michael Kors.
Usan bolsas de plástico o
morrales.
Son aquellas las que no usan Internet
sino 30
pesos de recarga de datos.
Las de mala ortografía,
las
de fiestas patronales
en lugar de obras de teatro.
Existen
mujer sin doctorados,
las que no son abogadas
secretarias o
ingenieras,
las de vestidos de manta y huaraches.
Son
aquellas que ves vendiendo frutas
sentadas en mercados o debajo
de mercuriales,
las que no saben que la libertad de la mujer
es
la actualidad hoy en día.
Pero son felices mirando
paisajes,
contando las estrellas
tienen tiempo para poner
sueños a su día.
Mujeres, como la Madre Tierra,
fértil,
callada, protectora y fuerte,
porque cada mujer indígena
lleva
consigo poesía.
Dharius Vidal